Yoga: Historia del Lejano Oriente
En el Lejano Oriente tienen una costumbre muy sencilla y práctica: consiste en tener en el hogar una bandeja pequeña con dos candelabros.
Cuando hay una pelea en el matrimonio, y ninguno quiere romper el silencio, lo único que tienen que hacer él o ella es encender una vela para mostrar su deseo de finalizar con la pelea.
Cuando el otro prende la otra vela, entonces ambos saben que la rabia ha terminado y pueden sentarse a conversar con más calma.
Por supuesto que a veces permanece una sola vela prendida durante días...Pero eso no importa...
Tarde o temprano la otra vela también arderá.
Al finalizar el conflicto y el poder solucionar los problemas con calma, serenidad y respeto; la pareja deberá, según la costumbre de Oriente, arrodillarse frente al altar de su hogar y agradecer el haber salido de la oscuridad y alcanzado la luz.
Si bien es cierto que en Occidente no tenemos esta costumbre, no está de más agradecer a Dios, al Universo, al Infinto, etc, por haber logrado alcanzar la calma y encontrar las soluciones sin lastimarnos ni lastimar al otro con las palabras que muchas veces hieren.
La práctica del Yoga y la meditación nos ayudan a enfrentar estos desafíos... ¿Hoy ya hiciste tu práctica de meditación?
