La práctica del Chi Kung (Qi Gong o Yoga Chino) nos ofrece este eficaz y poderoso trabajo corporal que produce una tonificación muscular notable en toda la musculatura de brazos y pecho. Aunque no utiliza sobrecarga (pesas) tiene un resultado muy rápido en el desarrollo de masa y fuerza muscular. Además de revitalizar al cuerpo.
Como hemos visto en algunas entradas de Yoga Bioenergético y en las clases cuando los grupos musculares más grandes son estimulados, al aumentar la cantidad de hormona de crecimiento en el cuerpo, los músculos más pequeños también son impulsados al aumento de masa muscular. Por esta razón podemos combinar el ejercicio de presionar la esfera con posturas de Yoga Bioenergético que ya hemos trabajado.
Paso a Paso:
- De pie, adopte una posición cómoda. Una separación de los pies similar a la de los hombros es muy adecuada.
- El movimiento está sincronizado con el ritmo respiratorio. Esto marca una importante diferencia con los ejercicios occidentales.
- La respiración debe ser lenta y profunda. Usamos la "respiración Tan Tien" que vimos en las primeras entradas del blog, que es la respiración básica del Yoga Chino. La realizamos así: Inhalamos por la nariz, expandiendo el abdomen todo lo que podemos. Exhalamos por la nariz o la boca ligeramente entreabierta, contrayendo muy bien el abdomen, lo cual produce un trabajo marcado sobre los músculos abdominales y un masaje sobre los órganos internos.
- Empezamos con los brazos bien abiertos, como si estuviéramos sosteniendo una gran esfera.
- Al exhalar, nos imaginamos que estamos comprimiendo esa enorme esfera. Visualizamos como si REALMENTE estuviéramos presionando una pelota que opone mucha resistencia a nuestro "abrazo". Debemos hacer que intervengan todos los músculos de los brazos y sobre todo los pectorales, tratando de que trabajen todas las fibras musculares posibles.
- Al llegar al punto en el cual la manos casi se tocan, comienza la segunda etapa. Inhalamos, y al mismo tiempo vamos abriendo los brazos lentamente, para volver al punto de partida. En este caso imaginamos lo inverso, o sea que vamos expandiendo la esfera con el esfuerzo de nuestros músculos, y ésta se resiste a nuestro intento. Aquí intervienen activamente los músculos dorsales, los hombros y nuevamente los brazos. Tenemos que enfocarnos para sentir que las fibras musculares efectivamente trabajan.